dia carcelario, que me trae a la vista cosas antiguas.
antiguas que no viejas.
alguna que otra herida ya cicatrizada(que remedio en este mundo de cuchilladas y de listos)
otras mas agradables, buenas guardias,
risas sinceras en momentos de tensión
momentos en que el trabajo se hacia menos duro
no menos duro, solamente mas limpio
con mas alegria.
gente que pasa y te recuerda dias soleados de hace ya casi seis años
vestidos con ropas blancas y rojas y empujando carritos dobles.
recuerdos de malos dias, trabajos que pudieron ser y se escaparon por un tris(a lo mejor era demasiado joven para defender lo mio)
recuerdos de solo hace unos meses(que ya son eternos) de cuando cuatro mil kilos de acero nos trasladaban de la mas absoluta incomprension a la increible lucha por la supervivencia.
recuerdos que asoman a mi cabeza como si fueran ayer,
compañeros con los que has crecido
con los que has hecho cosas que de estudiante te parecian impensables
compañeros...
dias...
meses...
años...
todo pasa rapido
demasiado rapido quizas
y te das cuenta que ya nada es como antes
esta pelicula cambia con el paso de los dias
esta pelicula se escribe dia a dia
y lo mas importante
que siga teniendo guión
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Cuando estás en la cárcel de los olivos,dejas caer con o sin los mil kilos de acero,gotas de lluvia en forma de ideas,con palabras que emiten recuerdos en forma de guión un guión muy bien trazado, es la vida....
ResponderEliminarBesicos.
Oye, cómo se pone esa pestañica roja con ese señor que parece que camina que se ve en el margen izquierdo de tu ventana...
ResponderEliminarMe gusta para saber quién anda por ahí, ahora que me ha desaparecido el contador....
Si no es muy dificil mandame un correo...
Gracias y buena guardia.
lo mejor de la película, y de la vida, no son los efectos, ni los actores, sino el guión... siempre el guión
ResponderEliminarUn guión que escribimos dia a dia, cada uno es diferente,aunque todos terminen del mismo modo.
ResponderEliminarSiempre digo que nacemos con fecha de caducidad y el tiempo que transcurre entre una y otra fecha lo construimos nosotros solitos.
besos
Ay, Alfonso, te atacó la fugacidad del tiempo, como a todos de vez en cuando. Lo malo es que nos pone de un filósofo tremendo. Todo, para no resolver nada, que nada se puede hacer contra ese señor Tiempo.
ResponderEliminarUn beso.
El tiempo pasa muy rápido, demasiado diría yo.
ResponderEliminarMe has hecho reflexionar, con tu escrito.
Abrazos amigo
No trabajes mucho!!!
ResponderEliminarEntrañable....duro...como la vida misma,como tu trabajo y el mio....
ResponderEliminarUn abrazo Fonsi.
Ea, Alfonso, de vez en cuando, como decía Leopardi, la extraña flor de la melancolía. No te conocía esta faceta, así que ten cuidado, que es cosa de gente madura, vamos, que se hace uno mayor y te pasan estas cosas, porque, te lo puedo asegurar, mis muchachos de segundo de bachiller ni se lo huelen.
ResponderEliminarSe nos pasa el tiempo tan rápido, que a veces la vida se nos escapa de los dedos.
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